LA CINEFILIA NO ES PATRIOTA

DEDICADO AL CINE PERUANO QUE AÚN NO EXISTE

Tuesday, March 31, 2009

LA TETA ASUSTADA: SEGUNDO TEXTO


Travesía por fantasmas y por túneles
Claudia Llosa narra paisajes femeninos disímiles entre sí dentro de un mismo campo de batalla, Fausta, cuyo cuerpo es el producto de la guerra y su miedo una proyección de un túnel cuyo recorrido es difuso. La travesía por este túnel está lleno de imágenes que surgen del mito y de la humanidad -stricto sensu- de la protagonista que al cruzarlo libera al personaje de una identidad siniestra e instrumental. La teta asustada es la triste enfermedad misteriosa que se hereda por el terror femenino, su mención abre la puerta a una marquesina de imágenes que si bien son efectistas no son necesariamente ficcionales y articulan la película.
Los cantos en quechua iniciales son el sonido de la vida abandonando la madre de Fausta que antes de exhalar deja un testimonio que no queda registrado más que por la andinísima tradición oral a pesar encontrarse en el medio de la periferia de Lima, densa y agitada como ninguna parte del Ande. Las bodas en el arenal permiten ver perfiles personales bastante válidos dentro del film, ante el silencio de Fausta algunos indagan. Ella accede a trabajar como empleada doméstica para darle una digna sepultura a su madre cuyo espíritu está atrapado aún en la casa y es estrepitosamente taciturno cuando el cadáver procrastinado se presenta en la película. La relación con su empleadora, Aída, devela finalmente el conflicto interpersonal central del filme tratado rápida y magistralmente, y que es metafórico por evocar esta accidentada relación criolla-indígena, la mujer de la casa es más paternalista que explotadora pero nunca repara en la presencia real de Fausta sino que solo busca llenar sus oídos de la música de su empleada, inspirarse en el exotismo y profundidad de su voz; la chica quiere las perlas, la señora quiere explotar el espontáneo cantar de la chica. Fausta finalmente sale del túnel del susto, es decir, llega la reconciliación como un acto simbólico, no hay nada después.
No es una película complaciente, no se inmiscuye en pasiones reivindicativas o proyección de la vida marginal al modo del Discovery Channel. El largometraje va más allá, es un acercamiento individualizado a un caso concreto que de ninguna manera busca homogeneizar a peruanas y peruanos sino que es recalcitrante en la particularidad de la historia y de los personajes.
Los fantasmas de La Teta Asustada no tienen por qué ser un retrato del país y su memoria, en realidad la especificidad contribuye a una desestigmatización sincera del indígena cuya imagen está siempre sujeta a una mirada colectiva, franca debilidad del cine peruano y que ha sido superada por esta visión más sincera. Esperar una reivindicación gratuita como espina dorsal del film es un acto deplorable y que siempre va acompañado de una visión occidentalizante de la película que pretende catalogar lo pretencioso de la comunidad que rodea a Fausta como denigrante, un gesto inequívoco de que en nuestro país aún se piensa en una inclusión del indígena como en un acriollamiento del mismo, racismo inconsciente que se usa para sentenciar ingenuamente que la película es racista. Verdadero punto de inflexión en el cine peruano, un atrevimiento remarcable de Claudia Llosa y una actuación prodigiosa de Magaly Solier.
Yusef Simon

La Cinefilia no es patriota

JUEGO CON MI ESPEJO DE PLASTILINA


Varias vidas. Algunas muertes

La galería REVÓLVER comienza el 2009 con la inauguración de la exposición “Varias vidas. Algunas muertes” de la artista Stefania Polo. Esta exposición nos ofrece una mirada lúdica e irónica en torno a la vida, el dolor y la muerte.

Jugando constantemente con las fronteras entre lo inocente y lo reflexivo, lo trágico y lo cómico, lo repulsivo y lo atractivo, lo tierno y lo agresivo, esta muestra nos introduce en un no-inocente juego de inocencia, en una placentera y liberadora caricaturización del dolor.

La exposición se inaugura el jueves 2 de Abril a las 8:30 pm en la galería REVÓLVER (General Recavarren 298, Miraflores) con Plug Plug! en vivo. La exposición durará hasta el 8 de mayo.

Ingreso libre.
Jueves 2 de Abril
8:30 p.m. Inauguración
10:15 p.m. Plug Plug!
Te recomendamos visitar el fascinante blog con los trabajos y apuntes de la artista:
La Cinefilia no es patriota

Monday, March 30, 2009

LA TETA ASUSTADA (2009), DE CLAUDIA LLOSA


Empezamos una serie de textos sobre la única (o primera, seamos optimistas) película peruana premiada con el Oso de Oro en Berlín; película que sigue dando vueltas en la cabeza de todos nosotros, generando reacciones de todo tipo. Queremos reflejar ese curioso estado también por aquí. Con ustedes, el primer texto de la serie.
La teta asustada y sus animales heridos

Fausta es casi una adolescente que arrastra algo peor que ser violada. Ella es el fruto de una violación, el resultado del peor recuerdo de su madre.
La película abre con la pantalla en negro y una canción en quechua, a medida que avanza logramos reconocer que es la voz de una anciana, la canción nos introduce a la historia, una historia donde el pasado es más vívido que el presente.
La primera imagen de La teta asustada es la de una mujer mayor postrada en la cama y su hija acompañándola, compartiendo no sólo en el espacio de sábanas y paredes carcomidas por la humedad, sino también esa canción.
Apoyada en una fotografía impecable, Claudia Llosa construye dos universos paralelos: el del arenal con corazón kitsch y el de Fausta, donde todo está como suspendido, especialmente el tiempo y donde ella es una silueta.
La escena con los preparativos de la boda evidencia la interacción de estos dos extremos. Un comedor fuera de la casa, ula ulas colgando del techo, cuadros de íconos chichas, una familia conversando sobre los detalles de la boda y una novia engreída y huachafa cargando con ayuda de su hermano la cola de su vestido y sacudiéndolo de la arena, aunque parezca imposible porque todo a su alrededor es polvo. Ese es el cuadro en el que irrumpe Fausta y su presencia muda. Ella se queda parada, observa todo, nos perturba, se desmaya y se ve aplastada por el exterior, por sentirse una extraña en una cultura donde el tiempo pasa muy rápido encima de ti y con todos sus adornos.
Este es el punto de partida de los simbolismos: la papa, las perlas, el mar, el pezón, el puño cerrado. Hay escenas potentes y preciosas construidas sobre esa cantidad de símbolos, como aquella donde la dueña de casa recoge agachada las perlas junto a Fausta como si tuviesen todo el tiempo del mundo, como si empezaran a ser parte de algo.
Los símbolos son uno de los puntos fuertes y a su vez uno de los más débiles de la película, cuando te das cuenta de que se abusa de ellos y nos damos cuenta de que una película seria tampoco tiene que convertirse en la continuación de las clases de semiótica.
Madeinusa nos había probado muchas cosas, una de ellas es que Magaly Solier sabía actuar y crear personajes, con algo más que técnica, personajes desde sus entrañas; y que sabía no dejar de sobrecogernos. Solier interpreta a Fausta como si fuese un animal herido. La teta asustada es una película sobresaliente porque construye una mirada sobre los animales heridos que no se guían por sus sueños, solo huyen de sus pesadillas.
Ana Carolina Quiñonez Salpietro
La Cinefilia no es patriota
Crítica de Yusef Simon:
Crítica de Eugenio Vidal:
Crítica de Mario Castro:
Crítica de Diego Cabrera:

Thursday, March 26, 2009

EL RESPLANDOR (1980), DE STANLEY KUBRICK

Las primeras imágenes que recuerdo de El Resplandor pertenecen a mi temprana infancia, cuando en la televisión pasaban el programa Cinemanía (cómo me gustaba la voz del presentador); en el intro del respectivo programa había una pequeña secuencia de un hombre persiguiendo a un niño por un túnel blanco y luminoso: no le prestaba mucha atención en ese momento, ya que yo prefería la parte de Poltergeist; así que pasarían los años y las únicas referencias a Stanley Kubrick que serían constantes acerca de su trabajo fueron gracias a la semana santa y la película Espartaco, y una referencia constante al rimbombante título La Naranja Mecánica, que durante años pensé, que, al igual que Espartaco, era una película de gladiadores o guerreros del medioevo; eso hubiera sido todo, pero considero que debo agregar la parodia al Doctor Strangelove en el anime Gigi, capítulo que vi en varias ocasiones.

Pasé mi adolescencia, donde pude de pura casualidad ver La Naranja Mecánica y Full Metal Jacket, llegué a la universidad donde los ciclos gratuitos no podían desperdiciarse; entonces me enteré que pasaban un día El Resplandor. El folleto no podía darme mejores referencias: Stanley Kubrick, Jack Nicholson y la novela de Stephen King. Dije: GUAU; acaso podía yo pedir más, el encuentro de tres ídolos míos era cosa de otro mundo. Dejé de almorzar para hacer la cola y ganar buenos asientos, como lo hicieron algunas amigas mías y tantos más. Splash.

La película comienza con una visión panorámica de las montañas, y un pequeño escarabajito recorriendo toda esa inmensidad, de ahí viene el rótulo de la entrevista, forma de narrar que la emparentaba directamente con el libro, pero ahí nomás queda ese asunto de la novela; supuestamente la historia quiere narrarnos la descomposición familiar a través de la caída hacia la locura del personaje de Nicholson (Jack Torrance), pero la pregunta es ¿cómo van a demostrarnos la degradación, si ya en la primera escena Jack ya parece demente? Quizás algunos digan, estás exagerando causa, entonces recurramos a la siguiente escena después de la entrevista para confirmar -en mi opinión ésta es la mas escalofriante de la película-; la familia conversando en el escarabajo mientras se acercan al hotel, pero, ¿por qué la más escalofriante? Miren nada más cómo actúan, si son como zombis, dicen las líneas como leyendo un teleprompter, y un Déjà vu muy personal, ya que la mención de la caravana de inmigrantes que se perdió por aquellas montañas, y que tuvo que recurrir al canibalismo para sobrevivir, me recordó a Ravenous de Antonia Bird; película que se había estrenado solo meses antes de ver yo El Resplandor, y finalmente la sonrisa demencial de Jack Torrance, que ya estaba loco y ni siquiera había puesto un pie en el hotel.

Pero era el hotel lo que lo hacía caer en el torbellino de la locura... Tal vez editaron mal.


Al aproximarse al lugar el escarabajito, vemos un hotel bastante alejado de las ciudades, tanto así que por su ubicación más bien tiene el aspecto de un centro de esquí sobre nieve, pero la historia nos cuenta que el hotel es abandonado en invierno, en lo personal no entiendo.


Se acaba de meter el dedo en la nariz; eso sí que hubiera impactado, pero Waters era quien tenía que hacerlo.



El niño sigue hablando con su dedo, y es entonces cuando el sempiterno personaje negro, tan inútil en la trama que no merece que se mencione por su nombre, se da cuenta de las habilidades del niño, y le cuenta la teoría del resplandor, se van todos los que trabajan y ya saben, cuando los dueños se van y los fantasmas se divierten… bueno, eso tendría más sentido que lo que ocurre en esta película. El niño da vueltas y vueltas en su triciclo hasta toparse de vez en cuando con las gemelas fantasmas. Es lo más interesante y lo único importante que hace en toda la cinta, madre e hijo pasean por el laberinto del jardín, mientras Jack sigue perfeccionando su sonrisa demoníaca, el niño entra a cierta habitación misteriosa de número 237, pero misteriosa ¿por qué?, no lo sabemos, la esposa de Jack le echa la culpa de todo lo que ocurre a pesar de que lo único que ha hecho es discutir con él una vez y tener pesadillas, será ese el motivo por el cual Jack comienza a agitarse como un mono, y habla con supuesto cantinero fantasma.



¿Quién parece más espectral? Ustedes decidan.


Volvamos a entrar en la habitaron 237. Aquí es donde la película se va bastante de largo, mostrándonos el personaje de la mujer vieja y putrefacta, como salido de la película El regreso de los muertos vivientes o The House. Mientras esto ocurre, el anciano negro con una capacidad de telepatía o telekinesia que ya quisiera el Profesor X, escucha el llamado del niño a pesar de estar a miles de kilómetros, ya que para llegar al Overlook tiene que tomar un avión y viajar por las montañas… toda una travesía. Para que… uf.

El ir y venir de uno a otro lado continúa y no sabemos nada, en una de las conversaciones de Jack con un mesero fantasma en el baño se da el diálogo más memorable de la película:

Mozo fantasma: Sabía, Señor, que su hijo ha pedido ayuda.
Jack: ¡Ayuda!
Mozo fantasma: Sí, a un nigger (negro).
Jack: A un nigger.
Mozo fantasma: Sí, a un Cook nigger (cocinero negro).


Por supuesto, si ya el hecho de pedir ayuda a un negro era peligroso, pedirle ayuda a un negro y cocinero era el fin, ya que al parecer en la película ser cocinero es como ser sacerdote, exorcista, Zé do Caixão, Iron Chef o lo que sea, era peligrosísima la llegada de este negro cocinero, porque podría destruir todo el Overlook, con sus poderes de cocina.

Jack Torrance escribe una novela (supuestamente) durante casi toda la película y su esposa es realmente la que hace el trabajo que a él le encargaron. El descubrimiento de lo que escribe da pie a la situación más original que tiene este despropósito de film, imitada hasta la saciedad sobre todo en la televisión; a Shelley Duvall sube y baja en su actitud hacia Jack, mientras el negro cocinero trata de llegar esmeradamente al hotel; de improviso Jack se pone amenazante y demente o, al menos, se da cuenta la esposa, Jack la persigue, ella lo golpea, luego de un rato agarra el hacha y los persigue a ella y a su hijo, diciendo esa famosa frase al romper la puerta con el hacha:

Jack: Aquí está Johnny…

Aquí está Jack... Perdón, Johnny...

Que hacía referencia a Johnny Carson, un famoso conductor de Talk show, por aquellos años, y cuya entrada al escenario era con esa frase dicha por una voz en off; por aquí solo pocos la entienden la referencia: persigue a su hijo, entra el negro cocinero y lo matan de un hachazo apenas lograba entrar al Overlook; esto, supuestamente, es una ironía que refleja que el asunto tiene que resolverse dentro del seno familiar sin intervención de extraños, lo cierto es que el papel puede funcionar, pero al verlo en imágenes parece un chiste, al menos cuando lo vi la primera vez todos comenzamos a reír por la estupidez de la situación , viajar tanto para morir así, sin hacer nada, es risible y para mí hasta ahora lo sigue siendo, no por nada en uno sus especiales de Halloween los Simpson se burlaron de esa situación una y otra vez, pero debo admitir que sirvió para despertar a toda la gente de la sala que estaba durmiendo… ya que gracias a la risotada de los que estábamos despiertos (me cuento como si yo lo hubiera estado despierto… ¡hipócrita!), despertaron, y evitaron el roche de despertarse cuando ya los demás salían, al menos en el libro el negro cocinero que sí es digno de mencionar, su nombre es Hallorann, salva al niño y su mamá, pero aquí, el desastre.

El niño corre por el túnel de nieve, produciendo mi más viejo recuerdo de la película, Jack se congela y ya, se van, fin.

Está bien, no menciono la foto final por que me parece idiota, explica que supuestamente (como yo lo tomo): Jack es una especie de reencarnación o algo así, pero debió guiarnos a eso, en cambio, durante toda la peli se sopla todas las pistas en una sucesión de imágenes que no van a nada, debieron dejarlo de lado como todo lo demás que se quedó fuera y daba sentido a la historia.


Esta foto lo dice todo. O no.

Al parecer el análisis del microcosmos familiar no le venía bien a Stanley Kubrick, sino vean Ojos bien cerrados.

Si es cierto lo que comentan, hacía repetir escenas hasta 80 veces, no creo que Kubrick lo hiciera por ser perfeccionista, como popularmente se dice que es, sino que no entiende el género del terror, menospreció un poco el género al comenzar a filmar: se nota la tensión en las tomas, nunca está seguro de si lo hizo bien.

La película es un perfecto anuncio de 2 horas acerca de los beneficios del Steadycam.

¿Qué es lo que provoca la caída en la locura de Jack? Nunca me he dado cuenta de qué es lo que lo vuelve loco, y es que ya estaba loco antes de llegar a la casa, los fantasmas no tuvieron nada que ver. Hay un gran vacío que separa a los fantasmas de la gente, nunca se chocan en verdad y nunca tienen que ver el uno con el otro, al menos no de la forma invasiva que supuestamente debería indicarnos la progresiva degradación mental de Jack; las referencias a una vida pasada es demasiado efímera para lo pesada que se vuelve la película, gracias a la tensión de Kubrick, al no darse cuenta desde el inicio en lo que se metió; coincido con Stephen King, Kubrick hizo una película sobre el vacío. Se nota que el vacío de El Resplandor es más grande que los espacios del Overlook.


Alguien puede decirme qué pasa aquí.

También Kubrick tenía razón al decir que la novela tampoco está tan buena; esta información es muy cierta, pero de ninguna forma puede funcionar como disculpa, ya que ¿qué novela de Stephen King es realmente buena?; pero la he leído y debo decir que al menos tiene coherencia, y va armándose lentamente hasta llegar al final, en cambio aquí parece que el rompecabezas era de 30 fichas y solo nos quisieron dar 25.

Los verdaderos fantasmas en mi opinión eran la familia, sobre todo la espectral Shelley Duvall, una mezcla de Morticia Adams y Mary Poppins, los dizque fantasmas se ven más humanos, sobretodo el cantinero, así que estoy seguro de quiénes eran reales y quiénes fantasmas.


Insisto. Quién es el espectro.

La mítica Habitación 237, ¿mítica? Bueno, quizás en la novela, porque aquí se resume a un par de calatas, una buena y otra fea.

Podrán decir que hizo para demostrar que el mal es mas terrorífico cuando se oculta en la luz, (casi no hay lugares oscuros en toda la peli); bueno les recomiendo un capítulo de Expedientes X, que muestra de mejor forma ese aspecto de el mal, oculto en la luz.



Qué trailer tan efectista la sangre saliendo del ascensor, la cámara inmóvil, ausencia total de dinamismo; no he visto peor trailer.


Gloriosa exhibición de hemoglobina… Quién diría que yo, un amante de la sangre, pensaría que un mar de sangre como este está de más.

Entonces Stanley Kubrick hizo una película para él, esto no en el buen sentido de que el maestro hace pelis como le gustan y como las siente, sino que esta vez la hizo para que solo pudiera entenderla.

La música de esta película está muy bien escogida, es la parte más lograda.

La idea argumental de la casa embrujada (en este caso el hotel) es bastante convencional, y muy manida en el género del terror, pero como dicen, no hay historia mala sino mal contada. Aquí no llega a lo siniestro que puede llegar a ser, como en The Haunting de Robert Wise, estilo que pretende imitar dándole la vuelta con el uso de la luz, pero está de cabeza la peli.

He llegado a la conclusión de que El Resplandor no debe verse como una película individual sino como la segunda parte de una trilogía, que podría llamarse la Trilogía de la Locura de Jack, veamos:

Primera Parte: Alguien voló sobre el nido del cuco.
Jack se hace el loco y lo encierran en el manicomio, le aplican electrochoques, lo cual lo deja mal mentalmente.


Segunda Parte: El Resplandor
Jack se escapa del manicomio, se casa, tiene un hijo, la trata de hacer como maestro pero no la hace, se va cuidar el Overlook, donde la soledad y el encierro lo hacen ver fantasmas (lo cual es más lógico); y lo termina de frikear.


Tercera Parte: Batman
La sonrisa demencial de Jack madura y comienza a usar su locura para el crimen, convirtiéndose en el Guasón.







Lo ven, era una trilogía: muy solapada por cierto; el origen de la locura de Jack está en los electrochoques de la primera parte, y ustedes creían que fueron el hotel, los fantasmas y quien sabe qué más… ¡por favor!


SHAY

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Otro texto sobre El Resplandor:



Wednesday, March 25, 2009

ESTE VIERNES 27 DE MARZO... PREPÁRENSE


MEGAPRESENTACIÓN LITERARIA (POESÍA Y NARRATIVA CON INFLUENCIA CINEMATOGRÁFICA) CON LA EXPLOSIVIDAD LATENTE DE UN EXPERIMENTO QUE SE APROXIMA AL DESENLACE.
PRESENTACIÓN DEL LIBRO "PARADOJAS TREINTA POEMAS ENTEROS, SEIS FRACTURADOS Y UN CUENTO UNIVERSAL" DE ALBERTO JAVIER ANGULO CHUMACERO, EN EL CLUB "HUANCAVELICA" SITUADO EN EL JIRÓN ALEJANDRO TIRADO 138 (DE LA CUADRA 9 DE LA AVENIDA AREQUIPA A LA AVENIDA ARENALES), EL VIERNES 27 DE MARZO DEL 2009, A LAS 7 PM, Y LOS COMENTARIOS ESTARÁN A CARGO DE LOS SEÑORES ANTONIO MUÑOZ MONGE, MAYNOR FREYRE Y JUSTO LINARES. LIBRO EXPERIMENTAL DE TREINTA Y SEIS POEMAS MÁS O MENOS DIVERSOS (AMOROSOS, FILOSÓFICOS Y SOCIALES), INCLUIDOS EN UN CUENTO DE HORROR ENTRE PSICOANALÍTICO Y FANTÁSTICO EN EL QUE EL PROTAGONISTA QUEDA ATRAPADO DEBAJO DE SU JARDÍN PARA COMENZAR A CREER EN UNA HISTORIA DE ADULTERIO Y MASACRE RELACIONADA CON LA HACIENDA QUE EXISTIÓ EN LA UBICACIÓN DE SU CASA Y LA POSIBILIDAD DE QUE EL FANTASMA DEL NIÑO CANÍBAL PRODUCTO DE AQUELLA TRAGEDIA SE ENCUENTRE ATRAPADO CON ÉL, ADEMÁS DE ENCONTRAR UN MANUSCRITO ANTIGUO RELATIVO A ESA ÉPOCA CON LOS TREINTA Y SEIS POEMAS QUE PUEDEN ASOCIARSE CON LA HISTORIA DE LA HACIENDA Y CON EL MÉTODO QUIZÁ MÁS ESCALOFRIANTE QUE LA MUERTE PARA LOGRAR LIBERARSE.
DESPUÉS DE LA PRESENTACIÓN, VINO DE HONOR Y BUFFET.



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FOTOGRAFÍA, MEMORIA, Y AVANCES DE UNA NUEVA PELÍCULA PERUANA


El Museo de Arte de San Marcos, a propósito de la Exposición Fragmentos de una historia: La música andina en Lima, realizará una serie de actividades el día miércoles 25 de marzo:
4pm Conversatorio: La fotografía como memoria. Huaynos, Mulizas, Yaravíes: La gesta popular peruana a través de sus héroes musicales. 60 años cambiando el Perú desde abajo. Contará con la participación de Willy Nugent, Susana Pastor y César Ramos.
6pm Proyección de los avances de la película nacional Coliseo. Contaremos con la participación del director Sandro Rossi.
7pm Reconocimiento a los músicos, intérpretes y compositores que forman parte de la exposición fotográfica de Nelly Plaza, Fragmentos de una historia. La música andina en Lima. A cargo de Antonio Muñoz Monge y Germán Carnero Roqué, Director del Museo de Arte del Centro Cultural de San Marcos.
Las actividades se llevarán a cabo en las Salas de exposición del Patio de Letras, segundo piso del Centro Cultural de San Marcos, en Av. Nicolás de Piérola 1222, Parque Universitario, Centro Histórico de Lima. Ingreso Libre.
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Tuesday, March 24, 2009

ENTRE LA VIDA Y LA MUERTE... UN CUENTO


"Tómate un Cuento" Presenta:

"Cuentos entre la Vida y la Muerte"

Tal como la muerte no existiría sin la vida, la vida no existiría sin los cuentos... Porque es así, la vida, una sucesión de cuentos cortos, largos, alegres, tristes... hasta que llega el cuento eterno que mal llamamos muerte... Los cuentos, la vida y la muerte se entrelazan en esta velada a media luz para compartirnos sus secretos y misterios. Los invitamos el MIÉRCOLES 25 de MARZO a la segunda velada del espacio "Tómate un Cuento" en el Delfus Bar -San Martín 587 Miraflores, altura de la 7 de Larco- a las 8:30pm (hora exacta).

En esta oportunidad, además de los cuenteros residentes del espacio, contaremos con la presentación de uno de los mejores cuenteros del Perú: Miguel "El Chato" Álvarez.
Los esperamos!!!!
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Monday, March 23, 2009

CINE-CLUB CAYETANO HEREDIA: 5 AÑOS

The Heart of the World

Five

El Sol del Membrillo


Histoire(s) du Cinema

El Hombre de la Cámara

Juventud en Marcha


Embracing



La Humanidad

Window Water Baby Moving


Cuentos de Tokyo


Gatica el Mono


Pickpocket


La Pasión de Juana de Arco

Límite


The House is Black




Guy Maddin, Abbas Kiarostami, Víctor Erice, Jean-Luc Godard, Dziga Vertov, Pedro Costa, Naomi Kawase, Bruno Dumont, Stan Brakahge, Yazujiro Ozu, Leonardo Favio, Robert Bresson, Carl Theodor Dreyer, Mario Peixoto, Forugh Farrokhzad... Como verán, estos últimos 5 años nos hemos procurado las mejores compañías... Y estos son solo algunos...
Un Martes 23 de marzo de 2004 fui invitado por mis amigos César Guerra y David Sandoval para comentar la primera película proyectada en este cine-club: La Noche Americana, de Francois Truffaut. Cinco años después, miremos las cifras: se proyectaron, hasta ahora, 150 películas agrupadas en 18 ciclos, casi sin interrupciones. El Cine-club estuvo auspiciado primero por la Facultad de Psicología de Universidad Peruana Cayetano Heredia; actualmente está auspiciado por el Centro Cultural y Académico de la misma Universidad.



Hoy, proyectaremos 71 Fragmentos para una Cronología del Azar, de Michael Haneke (6 de la tarde, Armendáriz 445 Miraflores, Ingreso Libre). Agradecemos a todos los curiosos y curiosas que a lo largo de este tiempo han asomado sus narices por aquí. Y, por supuesto, sigan asomándolas. Nuevos placeres y sorpresas los esperan...


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Saturday, March 21, 2009

LA ESCAFANDRA Y LA MARIPOSA (2007), DE JULIAN SCHNABEL


Libertad en el encierro

“Acabo de darme cuenta de que, aparte de mi ojo, hay dos cosas que no están paralizadas. Mi imaginación, mi memoria. La imaginación y la memoria son los dos únicos medios de escaparme de mi escafandra”. Jean-Dominique Bauby

Cuántas veces la imaginación nos ha salvado del encierro –de ese que a veces no percibimos– y nos ha permitido escapar a esos rincones que solo existen con la ayuda de la memoria. Para Jean-Dominique Bauby, redactor en jefe de la revista Elle, ésta no fue una posibilidad sino una fuga obligatoria tras sufrir, en 1985, una embolia que solo le dejó intacta la mente y la lucidez de su parpadeo, suficientes recursos para plasmar en el libro La escafandra y la mariposa su claustrofóbica experiencia.




Uno de los que leyeron el libro fue el pintor neoyorquino Julian Schnabel, quien decidió pintar esa historia en el lienzo del celuloide. El resultado es una poesía escrita con luz, que logra transmitir más que imágenes azarosas de una agonía, emociones que van desde el asombro que produce redescubrir la vida hasta el ahogo absoluto del cautiverio del cuerpo, pasando por la belleza de la liberación onírica de la que ‘Jean-Do’ (Mathieu Amalric) se alimenta para no terminar de morir.

Desde las primeras escenas, podemos percibir que la historia de Schnabel no es una reiteración de Mar adentro, película en la que Alejandro Amenábar se vale de otra historia real –la del tetrapléjico Ramón Sampedro (interpretado por Javier Bardem)– para reflexionar sobre el derecho a la eutanasia. No. La escafandra y la mariposa habla del ser humano encerrado, de lo que pudo ser el mundo interno de alguien que al final ni siquiera tuvo el privilegio del habla. Y nadie mejor que un artista para arriesgarse a hablar de la subjetividad de otro individuo, para rebuscar en el inconsciente ajeno, y para mirar a través de sus ojos lo que las palabras (del libro) a veces no logran decir. Su única arma será la empatía, y justamente es eso lo que logra trasladar a los espectadores con primeros planos bien logrados, desenfoques fotográficos y elementos sonoros que logran transmitir la confusión y la inquietud del encierro.




La fotografía del polaco Janusz Kaminski logra dar forma a esa subjetividad cuando se convierte en el inquieto ojo mediante el cual conocemos a los personajes que acompañarán a Jean-Do, durante dos impacientes años, y cuando inserta las alegorías del hombre que se hunde en el mar o la mariposa que se desnuda de su capullo. La sensualidad de las imágenes se desborda cada tanto para enfatizar que Jean Do está allí, vivo dentro de ese cuerpo estancado. Es la libido que viene en su rescate para alejarlo de la pulsión de muerte. De pronto la presencia de la fisioterapeuta o la logopeda, o incluso de la “madre de sus hijos”, se llenan de erotismo, de vida.
Los diálogos de sus visitantes, las reacciones de amigos y familiares, la contrastante vitalidad de sus hijos, las lágrimas de su padre, son un resumen de las penurias que Jean-Do tendrá que compartir con su ironía innata y su habilidad de sacar siempre una sonrisa en los momentos en que uno está a punto del llanto (Solo hay que recordar cuando la carcajada imaginaria de Jean-Do suaviza la cruel observación de dos empleados que deben instalarle un teléfono con altavoz “a un enfermo que no puede hablar”). Ese es otro acierto del director de Antes que anochezca, pues de este modo nos lleva de la mano por caminos que rozan el estremecimiento pero que no impiden una mirada más limpia del arte.




A este objetivo también responden el guión de Ronald Harwood (La lista de Schlindler), que ha sabido sacar del libro los puntos que debía unir con la imaginación, y el equilibrado montaje de Juliette Welfing, que en el momento justo supo cuándo transportarnos al pasado y cuándo evitarnos la lágrima con el ardid del símbolo. O incluso la delicada y a la vez enérgica música de Paul Cantelón, precisa…

Se extrañaba en nuestras salas una película que con sutileza nos echara en cara lo dormida que anda nuestra mente y el cautiverio que nos encierra por darle tanto protagonismo al cuerpo. Jean-Dominique Bauby empezó a volar cuando su cuerpo se quedó dormido, y ese vuelo, que nos recordó que la existencia iba mucho más allá que tener éxito laboral o familiar, nos lo transmitió Schnabel, cuando estábamos “paralizados” en nuestras butacas.

Claudia Ugarte

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Wednesday, March 18, 2009

GODARD! 19, MAÑANA, EN EL CENTRO CULTURAL DE ESPAÑA



¿La Revista Godard sí es patriota? Será por eso que, en su bella carátula, puedes ver la imagen -jeje, digamos que poética-, de la bella Magaly Solier... Godard! 19 estrena edición blanquirroja para desconcertar a propios y extraños... Si quieres saber más detalles sobre la mutación, te esperamos mañana Jueves 19 a las 7:45 p.m. en el Centro Cultural de España...

Godard 19= La Teta Asustada desde España + Críticas de Cartelera + John Cassavetes + Danny Boyle + Bruno Dumont + Pere Portabella + Joseph L. Mankiewicz= Godard! 19




La presentación correrá a cargo de los críticos de cine Claudio Cordero, Leny Fernández y César Miranda, quienes hablarán sobre los contenidos de la revista y las películas “La Teta Asustada” de Claudia Llosa y “Yo Serví al Rey de Inglaterra” de Jiri Menzel -ésta última será exhibida luego de la presentación-.

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